Un puñado de sueños quemados
en la hoguera abierta de tu corazón.

Tres o cuatro poemas creados
en tu compañía alguna noche fría

Y el recuerdo de aquellos momentos,
vividos al viento de la verdadera unión,
eso es lo que me queda eso es lo que yo tengo,
de todo tu tiempo mírame que yo no miento.

La palabra colgada en el aire
me rompe la calma y no tiene perdón
no hace falta explicar lo que pasa
la sombra del miedo es muy buena razón.

Tu mirada me sabe a suspiro
y dentro del silencio es igual que un complot
eso es lo que me queda, eso es lo que yo tengo
de todo tu tiempo, mírame que yo no miento.

Adiós amor, adiós mi amor,
me has quitado la vida,
y me has dejado esta herida,
que no sangra y que duele.

Adiós amor, adiós mi amor
y aunque no me lo pidas,
te regalo el amor que hay en mi,
que sin ti se muere.

Un puñado de sueños quemados,
en la hoguera abierta de tu corazón.

Tres o cuatro poemas creados,
en tu compañía alguna noche fría.

Y el recuerdo de aquellos momentos,
vividos al viento de la verdadera unión,
eso es lo que me queda eso es lo que yo tengo,
de todo tu tiempo, mírame que yo no miento.

Adiós amor, adiós mi amor,
me has quitado la vida,
y me has dejado esta herida,
que no sangra y que duele

Adiós amor, adiós mi amor,
y aunque no me lo pidas,
te regalo el amor que hay en mi,
que sin ti se muere,
yo te regalo el amor,
que hay en mi porque sin ti,
el amor se me muere.

Si piensas que estás vencido, lo estás.
Si piensas que no te atreves, no lo harás.
Si piensas que te gustaría ganar pero no puedes,
no lo lograrás.
Si piensas que perderás, ya has perdido,
porque en el mundo encontrarás
que el éxito comienza con la voluntad del hombre.
Todo está en el estado mental.
Porque muchas carreras se han perdido
antes de haberse corrido,
y muchos cobardes han fracasado,
antes de haber su trabajo empezado.
Piensa en grande y tus hechos crecerán.
Piensa en pequeño y quedarás atrás.
Piensa que puedes y podrás.
Todo está en el estado mental.
Si piensas que estás aventajado, lo estás.
Tienes que pensar bien para elevarte.
Tienes que estar seguro de ti mismo,
antes de intentar ganar un premio.
La batalla de la vida no siempre la gana
el hombre más fuerte, o el más ligero,
porque tarde o temprano, el hombre que gana,
es aquél que cree poder hacerlo.